Cómo ya sabéis, las funciones ejecutivas nos permiten llevar a cabo una gran cantidad de procesos superiores, como planificar lo que vamos a hacer, adaptarnos a los cambios, tomar decisiones, etcétera. Su complejidad es tal, que implica el funcionamiento de redes distribuidas por todo el cerebro (si quieres saber más haz clic aquí). A pesar de ser procesos que utilizamos en nuestro día a día, nuestro cerebro no suele ser un experto en todas las funciones ejecutivas. Es por esto, que no debemos perder la oportunidad de estimularlas. ¿Se te ocurre alguna forma? Te proponemos algunos juegos que nos permitirán potenciar estos procesos superiores.
Jefe Indio.
Se trata de un juego con el que podemos trabajar la inhibición o la planificación, entre otras funciones ejecutivas. Es muy dinámico y divertido sobre todo para los pequeños, y además fácil de realizar en casa. Uno de los participantes será el jefe indio, que deberá sentarse en el suelo y con los ojos tapados custodiar un objeto que al moverlo emita sonido (una pandereta, una pelota con un cascabel…). Los demás participantes serán el resto de la tribu india, que intentarán capturar el objeto sin que el jefe se dé cuenta. El objetivo de la tribu es llegar al punto de partida con el objeto y sin que el jefe lo perciba. El jefe dispondrá de 3 disparos con los que puede atacar a la tribu cuando crea que su objeto está en peligro. Cuando algún disparo alcance a un participante de la tribu, éste quedará eliminado.
Rush Hour.
Este juego nos va a permitir estimular nuestra planificación y concentración. Existen varios formatos de juego: de mesa u online. En ambos el objetivo es sacar nuestro coche del parking en el que se encuentra atascado. Para ello deberemos de pensar una buena estrategia de movimientos que permitan a nuestro coche llegar a la salida. En el caso del juego de mesa, serán las cartas divididas en 4 niveles de dificultad las que irán planteando los retos. Mientras que, en la versión online, se plantearán de manera automática a medida que los vayamos superando. De esta forma se trata de un juego muy accesible tanto de manera online como mediante una app.
Laberintos.
En este caso, se trata de un juego clásico que nos permite activar nuestro cerebro. Gracias a él pondremos en marcha funciones como la planificación o la toma de decisiones. El objetivo del juego es trazar un recorrido que nos dirija hacia la salida del laberinto. Aunque parece fácil, ¡es todo un reto tanto para grandes como para pequeños! Su accesibilidad online o a través de libros o revistas que tengamos por casa hace que no tengamos escapatoria.
Ahora que ya conoces algunas formas para trabajar las funciones ejecutivas, ¡solo queda jugar!
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